Hace más de 30 años, las diferencias de género en Chile eran las de un país Latinoamericano promedio.  

Sin embargo, en las últimas décadas, gracias a la democracia liberal y a la economía libre instaurada, las mujeres chilenas han progresado significativamente en materias de salud reproductiva y representación política, además de educación (con más mujeres que hombres que han completado educación superior) y partición laboral. 

Así, según el Índice elaborado por el PNUD, Chile se ha convertido en el país de América Latina con menos diferencias entre hombres y mujeres en diferentes ámbitos de la vida.